«serán lo que comemos» – el poder de la epigenética

Nuestro blog da un paso adelante hacia la especialización! Y es que a partir de ahora tenemos el placer de contar con el apoyo  y colaboración de la Dra. Inma González para todas las publicaciones relacionadas con la alimentación y la salud. Ella es la fundadora del centro integral de salud NOVADONA, donde a través de la medicina cuántica, biológica, la medicina estética y la que previene el envejecimiento, se fomentan sistemas preventivos que ayuden a resaltar la belleza de la salud.

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Al pedirle que nos hable de la importancia de una buena alimentación durante el embarazo, ella nos sorprende con la introducción a la EPIGENÉTICA, la ciencia que estudía todos aquellos factores NO GENÉTICOS que intervienen en la regulación heredable sin cambios en la secuencia del ADN, confiriendo así otra memoria a las células. El ser humano es una mezcla de genes y ambiente, no sólo la dieta sino las emociones, el entorno, los estímulos intelectuales, los hábitos tóxicos y los hábitos saludables, acaban influyendo más que los genes transferidos genéticamente en nuestro organismo.

Mediante la alimentación y hábitos de vida podemos conseguir variar o disminuir aquello heredado genéticamente. Pero no sólo «somos lo que comemos» en la epigenética, sino que nuestros hijos y nietos también serán dependiendo de nuestra alimentación. De aquí la importancia que alcanza la epigenética durante el embarazo, que funciona como una auténtica medicina preventiva antes de la concepción del futuro bebé.

La base de una alimentación inteligente deben ser los productos naturales y de temporada. Las frutas, verduras, cereales integrales y los alimentos sin procesar son indispensables en la alimentación diaria, ya que el exceso de sal refinada, el azúcar de mesa y las harinas blancas quitan nutrientes a nuestro organismo. Es importante incorporar las legumbres, controlar el consumo de lácteos y carnes rojas para obtener proteínas y vitaminas de calidad, minimizando también las grasas de origen animal. Algunos de los alimentos imprescindibles en nuestra mesa son: el brócoli, el aguacate, las mandarinas y las granadas. Las verduras de hojas verde oscuro son ricas en hierro y ácido fólico, los cereales integrales proporcionan vitaminas del grupo B, E y fibra.

Así que nuestras recetas van a estar orientadas en la dirección de cubrir las necesidades micronutricionales durante el embarazo. Teniendo en cuenta que el cuerpo de la futura mamá requiere niveles de calcio y fósforo más elevados, las necesidades de aportar hierro son altas, así como cubrir los niveles necesarios de Vitamina D.

Llevar una dieta equilibrada es el principio de una vida, y ahora también descendencia, más sana.»

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